Nuestro patrimonio no es muy abundante, pero dada la antigüedad de Villardompardo, algunos de los edificios que lo forman, se remontan a varios siglos atrás. Nunca les hemos hecho demasiado caso, parece ser que lo que uno conoce de toda la vida no se valora, pero ya ha llegado la hora de hacerlo y de ponernos manos a la obra para restaurarlo y ponerlo en valor. Algunos inmuebles están en manos de particulares, por lo que es más difícil su cuidado, pero confiemos en que tomen conciencia de la importancia que tienen y ayuden a conservarlo. En esta serie de fotos (en sepia quedan más "bonicas") os presento esos edificios y un poco de su historia:
Iglesia parroquial de Nuestra Señora de Gracia:
Según una inscripción que hay en la bóveda de crucería del baptisterio, la obra se terminó en 1545, pero el edificio fue ampliado y remodelado en varias ocasiones, una de ellas en 1612. Hoy en día se está restaurando la fachada posterior.
Castillo de los Condes de Villardompardo:
Comenzó a construirse tras la conquista de Villardompardo en 1245 y tuvo gran importancia en las guerras nobiliarias del siglo XV, entre el Condestable D. Miguel Lucas de Iranzo y los caballeros de la Orden de Calatrava. A finales del siglo XVI se remodeló y se convirtió en Castillo-Palacio. El I Conde de Villardompardo, D. Fernando de Torres y Portugal, comenzó la edificación de la bella portada renacentista, con el escudo familir esculpido en la parte superior (Foto de abajo). En la actualidad se está excavando el recinto interior, gracias a un acuerdo entre la Universidad de Jaén y el ayuntamiento de Villardompardo.
Ermita de Nuestra Señora de Atocha:
Muy probablemente fue mandada a construir por el I Conde de Villardompardo. Las primeras referencias de su existencia datan de 1612. Villardompardo siempre ha sentido gran devoción por la Virgen de Atocha. La escalinata anterior a la actual, que muchos hemos conocido y que estaba fabricada de piedra arenisca de Porcuna, no era tan antigua como pensábamos. Algunas personas mayores recuerdan que en los años veinte no existía, sólo había una cuesta terriza por donde la gente accedía a la ermita y a las casas que había junto a ella, dicha escalinata se construiría allá por los años treinta, tal vez durante la república, no recuerdan bien la fecha de construcción.
Pronto se picará la fachada para dejarla en piedra, sin duda ganará mucho.
Ermita de San Roque:
Es uno de los rincones más entrañables de Villardompardo. A la entrada de muchos pueblos se construyeron ermitas en honor a San Roque, porque era el Santo protector de las epidemias. A finales del siglo XVI ya existía esta ermita. Parece ser que en siglos posteriores estuvo en estado ruinoso, hasta que una familia la compró (probablemente en el siglo XIX) y la reconstruyó por una promesa. Hace poco, los descendientes de dicha familia, la restauraron y ha quedado en un estado perfecto. ENHORABUENA.
Muro posterior del Molino del Conde de Villardompardo:
Algunos os preguntaréis qué es eso y dónde está. Se trata de lo poco que queda del antiguo molino del conde, se encuentra en la parte posterior del primer edificio que encontramos a la derecha, al bajar hacia el pilar desde la esperilla. Data del siglo XVI como mínimo y pertenece a un particular. La parte de abajo está quedando un poco al "aire", como se aprecia en la foto, y podría perder estabilidad.
Fachada de la casa de Ramón Prados:
No siempre un edificio tiene que ser muy antiguo para considerarlo parte del patrimonio histórico de un pueblo. Todos sabemos que esta fachada es la más señorial de Villardompardo, fue construída por Ramón Prados Segovia (de Arjona) allá por los años 1928-29 en el estilo regionalista (con algunos elememntos modernistas) imperante en esa época, donde la azulejería y la rejería cobraban gran importancia como elemento decorativo.
El maestro albañil fue Manuel Armenteros (no es seguro el apellido) de Torredonjimeno, seguramente estaba muy imfluído por las fachadas del mismo estilo construídas en su pueblo: el bar Regina y el Casino, que aún se conservan en la plaza tosiriana. Precisamente esa histórica fachada es el problema de su conservación, ya que es necesario mantenerla aunque se reconstruya la casa por dentro. ¡A ver si alguien se anima!. Saldría un pequeño hotel rural envidiable para otros pueblos.
NECESITA UNA RESTAURACIÓN URGENTE.
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